20/3/09

CRÓNICA FRUSTRADA DE UNA CORRIDA MEDIO VISTA

Los “garcichics” llegan y te dejan la ilusión por los suelos, así de un plumazo.


Cuando se anuncian importantes compromisos para Diego Urdiales, torero de esta tierra riojana, el mejor que hemos tenido, y que vive un momento dulce. Cuando José Tomás anuncia el acontecimiento de la temporada en Barcelona, con seis toros en solitario, Morante y El Cid con Victorinos en Sevilla, toreros como El Juli, que también apuestan, Perera y otros, que también ilusionan … En fin, que vivimos un momento de variedad, y calidad, dentro del escalafón, que alimenta muchas esperanzas.


Pero llegan los toros de Garcigrande y te devuelven a una realidad, que existe, y que no es fácil de aceptar. El medio toro, ese con el que Enrique Ponce, por ejemplo, ha basado una tauromaquia entera. Los “Garcichics” son el prototipo del toro moderno, son un toro “chic”. Colmo de la sumisión y el descastamiento, obedientes y “bonitos”. Son, como decía Joaquín Vidal, toros de “cuarto de baño”.


Pero claro, ves a Luis Francisco Esplá, quién fue símbolo de lidiador para los buenos aficionados, con ese sucedáneo de toro, y se te viene el mundo encima. A Ponce, algunos periodistas taurinos lo llaman el “catedrático del toreo”, y no se dan cuenta del daño que hacen a la fiesta diciendo estas cosas. Porque habrá quien los crea, sin ir más lejos la plaza de toros de Valencia entera, donde Esplá, Ponce y Vicente Barrera han matado hoy seis “garcichics”, día de San José de 2009.


Por cierto, José Tomás asistió a la corrida, las cámaras de televisión lo localizaron, camuflado con una gorra y unas grandes gafas oscuras, en una delantera de grada.


Foto: www.burladero.com



1 comentario:

  1. Lo auténtico del toreo se intenta camuflar muchas veces con lo 'chic' jeje, llevas razon.

    Animo con el blog.

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